Conoce tu cepillo térmico

Para cualquier trabajo que se realice, es indudable que el resultado dependerá en gran medida, además de la pericia de quien lo haga, de los útiles con los que realicemos dicho trabajo. Y la peluquería no es una excepción.

Cuando nuestro estilista se dispone a peinarnos mediante la técnica de brushing hay que tener en cuenta que según nuestro tipo de cabello, éste debe elegir el tipo de cepillo a emplear, puesto que según con el que trabaje, el resultado puede ser muy diferente.

cepillos termicos

Los cepillos térmicos profesionales

Hoy en día la mayoría de peluqueros optan por utilizar cepillos térmicos. Este nombre engloba a todos aquellos cepillos cuyo cuerpo está fabricado en un material capaz de absorber el calor emitido por el secador para emitirlo directamente sobre el cabello, consiguiendo así que el servicio se realice de un modo más rápido y que, además, la forma que se le aporte al cabello sea más duradera. Estas características han hecho que este tipo de cepillos se hayan convertido en los cepillos profesionales más utilizados dadas las ventajas que aportan tanto al profesional a nivel de comodidad y rapidez en el servicio como al público por la duración del peinado.

Respecto a las púas de estos cepillos, la mayoría suelen ser de nylon, aunque con un tratamiento para mejorar la resistencia al calor. Los hay de diferentes grosores y dureza en función de qué tipo de cabello vayamos a trabajar ya que un cabello grueso necesitará una púa más dura que lo trabaje mejor y un cabello más fino requerirá de una púa más fina que no lo maltrate.

Las características de los cepillos profesionales

En lo referente al cuerpo del cepillo, como ya hemos dicho, tiene que ser de un material capaz de absorber el calor emitido por el secador y trasladarlo al cabello para modelarlo. Hasta hace unos años el cuerpo de los cepillos térmicos era de hierro o aluminio, pero de un tiempo a esta parte, con la incorporación de los nuevos materiales al mundo de la belleza han surgido cepillos de diferentes materiales como la cerámica o incluso el titanio. Estos últimos son los que están ganado terreno a nivel de uso profesional, ya que estos materiales, y la combinación de ellos, le confieren al cepillo ciertas ventajas extra, como son la mayor rapidez, si cabe, a la hora de trabajar y un mayor respeto por la calidad del cabello, aportándole, principalmente, más brillo en el acabado.

El mango del cepillo es la parte que más polémicas suscita, ya que cada uno tenemos un gusto y una preferencia. Hay de todos los tipos y formas: redondos, cuadrados, triangulares, finos gruesos, rectos, ovalados, acolchados, de goma, etc…; casi tantos tipos como peluqueros. Lo que debemos tener en cuenta a la hora de elegir el tipo de mango es que nos resulte cómodo para trabajar, ya que si no trabajamos a gusto con él, acabaremos retirándolo.