El tratamiento de parafina está indicado para hidratar zonas muy secas de la piel o lograr la rehabilitación muscular.
Hidrata las capas profundas de la piel y aumenta la circulación para evitar dolores musculares, artritis, contracturas, entre otros.
Es utilizado en gabinetes de estética para manos y pies ya que sus propiedades nutren y dan luminosidad a la piel.
¿Qué es la parafina?
Es un ingrediente que se funde a temperatura y su eficacia radica en el calor húmedo que transmite al cuerpo al estar fluida.
Entre sus propiedades principales destaca la rapidez de endurecimiento que posee al ponerse en contacto con la piel.
Su composición básica es un ingrediente sin olor y sin color, aunque con el tiempo se le han ido añadiendo aceites y olores para potenciar los beneficios que produce sobre la piel.
Al ser un producto impermeable y endurecido la humedad no puede salir, por lo que ésta vuelve a la piel hidratando cada una de sus capas en profundidad.
Ventajas del tratamiento de la parafina.
La parafina estimula la circulación sanguínea debido a que el calor húmedo que desprende actúa como vasodilatador y aumenta el flujo de sangre en las venas.
Aporta suavidad y elasticidad a la piel gracias a su efecto retenedor de humedad.
Además actúa como relajante gracias a las esencias y minerales incorporados en las parafinas actualmente.
Elementos para el tratamiento de la parafina.
Para obtener los resultados esperados es esencial contar con un buen material por lo que lo principal es la elección de la parafina.
La parafina debe aportar beneficios extras, como la de naranja y melocotón que posee propiedades antioxidantes, o la parafina de menta y monoi que posee propiedades refrescantes.
Otro elemento igualmente necesario es un fundidor que mantenga el calor adecuado para que la parafina no vuelva a su estado sólido.
Por último, también debes contar con papel de film o bolsas de plástico para concentrar el calor con la envoltura, y potenciar este efecto con manoplasy peucos de rizo.
Pasos para el tratamiento de la parafina.
- Derretir la parafina. Debe encontrarse caliente pero a su vez agradable al tacto.
- Exfoliar bien el área a tratar.
- Aplicar la parafina introduciendo la mano en el calentador de parafina o bien extendiéndola sobre la piel con una brocha.
- Repetir el punto anterior varias veces hasta conseguir una capa gruesa para que se mantenga el calor dentro.
- Envolver el área del tratamiento con una bolsa de plástico y cubrirla con toallas para que conserve la temperatura durante más tiempo.
- Una vez se haya enfriado, retirar la parafina cuidadosamente.
- Y por último aplicar una buena crema hidratante.
Productos recomendados para el tratamiento de parafina
– Parafina Para Tratamientos Manos y Pies Naranja Melocotón Pollié: tratamiento para pieles agrietadas con propiedades antioxidantes, nutritivas y protectoras de la piel.
– Parafina Para Tratamientos Manos y Pies Menta Monoi Pollié: tratamiento restaurador y tonificador de la piel. Equilibra el manto hidrolipídico natural de la piel y la vuelve más elástica.
– Fundidor De Parafina ST 3500 Asuer: disuelve la parafina a la temperatura ideal y la mantiene fluida para realizar tratamientos sobre la piel.
– Manopla y Peuco de Rizo Especial Para Parafina: fabricados con fibra de rizo que permite favorecer la penetración del tratamiento en la piel y logra potenciar sus efectos.
Para finalizar, después de efectuar el tratamiento de parafina y complementar la hidratación te recomendamos:
– Crema para la Piel Arual: fabricada para la hidratación de manos y pies secos, ásperos agrietados o expuestos a sustancias agresivas. Devuelve a la piel su hidratación de manera inmediata.
Ahora ya conoces todo lo que necesitas saber para conseguir unas manos y pies perfectos.
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